No te das cuenta de los segundos qe estás desperdiciando llorando, hasta que alguien te abre los ojos y ves que es verdad, que esos segundos que podrían haber sido sonrisas, han sido lágrimas, lágrimas que no te han llevado a otra parte que no sea la tristeza. Te das cuenta de que podrías haber disfutado más de la vida de lo que lo has hecho. Y ya no hay vuelta atrás, pero es verdad que una vez que te abren los ojos de esta forma, cada vez que llores, te acordarás de ellos, y hasta puede que te salga una sonrisa en esos momentos que nunca imaginaste que podría pasar. Parecen tonterías, pero todo esto, ayuda a ser un poquito más feliz y a tener una vida de la que uno mismo esté orgulloso.
Así que por favor, siempre, ¡ SMILE ! .
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